Con datos al día 27 de Abril, 2020

Municipios por nivel de contagio

La llegada del Covid-19 a México, ha alterado de forma abrupta la vida cotidiana de millones de mexicanos, sin embargo, es aún temprano para poder dimensionar sus ramificaciones y efectos de largo plazo en la convivencia y dinámica social. Sin embargo, la fuerza y amplitud del shock económico, ha logrado modificar paradigmas que han cimentado la economía economía global de los siglos XX y XXI. Con la entrada más álgida de la curva de contactos en nuestro país, resulta impostergable reflexionar acerca de las políticas que acompañarán la reapertura y reactivación económica.

El día 16 de abril, el Gobierno Federal informó que esperaba para el día 17 de Mayo levantar las medidas de mitigación en algunas regiones del país, a partir de la información de contagios disponible a nivel municipal. De igual forma, se comentó que en aquellas municipalidades con un alto nivel de contagio (o que tuviera presencia de personas infectadas), se levantarían las medidas hasta el primero de Junio. Si bien esta posición puede alterarse conforme se progrese positivamente (se reduzca o aplane la curva de contagio) la epidemia en el país, la posición resulta informativa respecto a las medidas que serán necesarias adoptar acorde al nivel de afectación de la enfermedad en el país. Gracias a la publicación de los microdatos disponibles en el sitio de la Dirección General de Epidemiología de la Secretaria de Salud, es posible analizar las características de las regiones en las que se tiene evidencia de presencia de COVID-19, a partir de tres categorías definidas por la propia Secretaría de Salud:

  • Contagios
  • Vecinos de contagios
  • Sin contagios y sin vecindad

Los resultados se presentan en la Tabla 1 presenta de acuerdo a estas categorías. En primer lugar se advierte que de acuerdo a la base de datos, en el 30% de los municipios a nivel nacional, se tiene al menos un caso reportado de COVID-19, esto es 738 municipios. Por otro lado, se definen también lo que son áreas con vecindad a municipios con casos confirmados. Estos representan el 43.6% del total o 10,71 casos. Finalmente, se reportan 647, o el 29.3% de los municipios sin ningún caso y vecindad a algún municipio con casos reportados.

Al comparar estos porcentajes con la población presente en cada municipio, las diferencias resultan significativas. No obstante que en los municipios con casos confirmados representan menos de una tercera parte del total, el porcentaje de personas que habitan en ellos conforman el 80.5%. En el caso de las regiones que se presume levantarán las medidas de mitigación de manera temprana (es decir que no presentan casos o son vecinos de una municipalidad con contagios) apenas si representan el 4.2% de la población. Cuando se toma en cuenta la distribución de la población indígena en el país de acuerdo a la clasificación municipal por nivel de contagio, llama la atención el contraste de los datos reportados previamente. A pesar de que en los 647 municipios donde no se reportan contagios o vecindad, habita apenas el 4.2% de la población, el porcentaje de la población indígena representa el 15.5%.

Lo anterior invita a analizar bajo una mirada territorial, de los posibles efectos tanto en el aparato productivo nacional, como en el bienestar de grupos más vulnerables durante y posterior a la pandemia del COVID-19.

Tabla 1. Distribución por nivel de contagio
Tipo de municipio Municipios Población Poblacción indígena % Mpo % Pob % Pob Indigena
Vecinos de contagios 1,071 18,606,688 3,665,924 43.6% 15.3% 30.5%
Con contagios 738 97,632,843 6,476,277 30% 80.5% 53.9%
Sin contagios o vecindad 647 5,099,055 1,864,199 26.3% 4.2% 15.5%
* Fuente: Secretaria de Salud, 2020
INEGI, 2015
INPI,2015

Por su parte, la vulnerabilidad de la población indígena resulta muy significativa, ya que en tanto que el la proporción de perrsonas infectadas a fallecidas de la población que no habla una lengua indígena es del 99%, para quienes hablan una lengua indígena es de 24.7% (véase tabla 2).

Tabla 2. Mortalidad del COVID-19 en la población indígena
Habla alguna lengua indígena Personas Infectadas Personas Fallecidas Porcentaje
No 13,172 1,313 9.97%
Si 154 38 24.68%
* Fuente: Secretaría de Salud, 2020

Economía y Bienestar

Producción bruta industrial

De acuerdo al Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas (DENUE) del INEGI, en México hay alrededor de 5,447,589 Unidades Económicas (véase Tabla 3), de estas, el 82.5% de las UE se ubican en municipios con casos confirmados de COVID-19. En los municipios sin vecindad o casos, apenas si representa el 4.0% de las UE a nivel nacional. En este sentido, al analizar por tamaño de empresa, se observa que la proporción de micro y pequeñas empresas es relativamente menor en los municipios sin contagios o vecindad. Lo anterior apunta a una precarización del aparato productivo en las regiones en donde no hay presencia del Covid-19.

Tabla 3. Distribución por Tamaño de empresas
Tamaño de empresa Con contagios Vecinos de contagios Sin contagios o vecindad Total nacional
0 a 5 personas 86.2% 91.4% 92.1% 87.2%
6 a 10 personas 6.7% 4.6% 4.2% 6.3%
11 a 30 personas 4.6% 2.8% 2.7% 4.3%
31 a 50 personas 1% 0.5% 0.5% 0.9%
51 a 100 personas 0.7% 0.3% 0.3% 0.6%
101 a 250 personas 0.5% 0.2% 0.2% 0.4%
251 y más personas 0.3% 0.1% 0.1% 0.3%
Total 100% 100% 100% 100%
* Fuente: INEGI, 2020

Al analizar la distribución de la Población Económicamente Activa, ésta presenta un patrón muy semejante al anterior. El 82.3% de la PEA se ubican en municipios con casos confirmados de COVID-19, en tanto que el 3.7% corresponde a municipios donde no se han reportado contactos o son vecinos de un municipio con casos.

En contraste, la contribución de los municipios sin vecindad o contagios a la Producción Bruta Industrial parece más que anecdótica, pues apenas si representa el 0.36% del total. De esta forma, en los municipios con casos confirmados, representan casi la totalidad del motor industrial del país con el 91.4% del PBT, de acuerdo a datos del Censo Económico del 2014.

Seguridad social

Al inicio de la llamada Jornada Nacional de Sana Distancia, gran parte de la conversación respecto a al impacto de la pandemia en la economía había orbitado alrededor de la previsible contracción del Producto Interno Bruto. Conforme han transcurrido las semanas, ha empezado a circular información que nos puede ayudar a dimensionar el efecto del cierre de la vida económica durante los meses de Marzo y Abril. Si bien es cierto que la mayor parte de la información corresponde al cierre del mes de Marzo, es razonable asumir que los datos apuntan a una reacción temprana de unidades económicas que se vieron afectadas de manera significativa durante este periodo. Conforme ha ido progresando en el país la enfermedad, más sectores de la economía han visto disminuir sus actividades, por lo que no será sino hasta el tercer trimestre, cuando podamos empezar a dimensionar el grado de afectación real en la economía.

El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pilar fundamental del Sistema de Seguridad Social en México, publica mensualmente la cifra de asegurados asociados a un empleo. De acuerdo a datos de la Secretaría del Trabajo, durante la pandemia se han perdido entre 15 mil y 25 mil empleos formales diarios. En este sentido,es posible tener una primera mirada de la dinámica de la perdida de empleos, a partir de los datos publicados por parte del IMSS para el mes de Marzo.

El gráfico de Cambio de número de empleos por municipio, muestra en un eje el cambio porcentual en el numero de empleos entre los meses de febrero y marzo y en el otro el logarítmo (re-escalamiento) del número de empleos presentes en cada municipio durante el mes de febrero. De igual manera de colorea cada municipio acorde a la categoría de nivel de contagio municipal. Si bien se muestra una gran disperción en torno al cambio porcentual registrado entre febrero y marzo, la mancha morada (municipios con contagios), domina ligeramente el extremo inferior derecho de la distribución de municipios, por ello no es de extrañar que es aqui donde se pierde, 130,941 empleos formales. Es decir en el resto de los municipios hubo un ligero crecimiento de 2,113 empleos en el mismo periodo, dando un gran total, resultando una perdida neta de empleos del orden de 130,584 puestos formales.

Lo anterior, representa una parte de la historia, al analizar tanto de manera sectorial como por el tamaño de las empresas, es de notar una fuerte concentración de la pérdida del empleo. La gráfica de Empleos perdidos por sector y tamaño de empresa, muestra que alrededor de 75 mil empleos fueron del sector servicios, es decir el 58% de los puestos formales perdidos fueron en el área de servicios y de éstos el 92.4% fueron de empresas de más de 500 empleados. El segundo sector con mayor número de pérdidas en el empleo es el de la Construcción con 31,914 plazas, registrándose el 84.0% de las pérdidas, en empresas de entre 6 y 250 empleados.

Un punto a destacar es que entre empresas de entre uno y cinco asegurados, durante este periodo se presentó un ligero incremento de 4,600 nuevas contrataciones. Por otro lado, el único sector que presentó un ligero crecimiento durante este periodo fue el de Transporte y comunicaciones, con un incremento de 3,240 puestos de trabajo.

Ahora bien, el componente territorial resulta por demás significativo en este análisis. El 36.6% o 47,859 de los empleos perdidos se ubican en el estado de Quintana Roo, seguido de Sinaloa con 7.8% o 10,243 empleos. Lo anterior sugiere que en su conjunto los sectores de Turismo y la Construcción fueron los más golpeados en la primera etapa de la pandemia, por ello no es de extrañar que fueron trabajadores de estos sectores quienes han reaccionado de forma más temprana por apoyos gubernamentales.

Empleos

De acuerdo a los indicadores de ocupación y empleo, publicados el día 27 de abril por parte del INEGI, entre Febrero y Marzo hubo una reducción de 0.4% de la tasa de desocupación, esto contrasta notablemente con los datos reportados por el IMSS. De igual forma no hay un cambio en la tasa de subocupación para el mismo periodo. El mapa de empleos muestra tanto el cambio en el porcentaje de desocupación como el cambio en el número de empleos. De acuerdo a estos datos, un numero importante de entidades muestran un ligero incremento en el numero de personas laborando, tal es el caso del estado de Quintana Roo donde el numero de personas aumentó un 0.1% o alrerdedor 874 empleos.

El fenómeno anterior puede tener varias explicaciones, una primera hipótesis es que las personas con un puesto formal dejaron temporalmente la PEA (no se encuentran trabajando ni buscando trabajo), con la promesa de regresar de regresar a sus puestos de trabajo una vez terminada la pandemia del Covid-19. Una segunda explicación es el propio proceso de recolección de información (por ejemplo los patrones pudieron esperar hasta el último tramo del mes de Marzo para dar de baja a trabajadores eventuales). De lo que reporta el INEGI, no existe evidencia suficiente para suponer que hubo un desplazamiento de los puestos de trabajo al sector informal.

Población en situación de pobreza

En lo que refiere al impacto potencial en la población vulnerable o en situación de pobreza, cconoceremos hasta mediados del próximo año a partir de la Encuesta nacional de ingreso gasto de los hogares (ENIGH), la cual será levantada en el segundo semetre del 2020. Hasta entonces, a nivel municipal solo disponemos de las estimaciones realizadas por el Consejo Nacional de Evaluacion de la Politica de Desarrollo Social (CONEVAL) a partir del Conteo 2015 levantado por el INEGI. A partir de esta información y al cruzarla con los categorías definidas por la Secretaria de Salud, se observan características muy significativas:

Al analizar la distribución del porcentaje de la población en cada municipio según el nivel de contagio, se observa una distribución acampanada en aquellos municipios con casos confirmados de Covid-19. Lo anterior significa que la pobreza en estos municipios se ubica principalmente alrededor del 50%. En contraste, la distribución de aquellos municipios sin contagios o vecidad a municipios con casos confirmados, esta significativamente cargada a la izquierda, es decir en los municipios de esta categoría presentan una mayor proporción de la población en situación de pobreza. Para el caso de los municipios vecinos de contagios muestra una distribución que asemeja un punto intermedio entre las primeras dos distribuciones.

En el caso de la población en situación de pobreza extrema, la distribución de los municipios con contagios y vecinos de contagios, estan cargados a la derecha, más no así los municipios sin contagios o vecindad, que muestran una curva aplanada a lo largo de su distribución. Lo anterior refuerza, la evidencia inicial respecto a la vulnerabilidad de aquellas áreas donde no se tienen registros de presencia del Covid-19. Por ejemplo, no obstante que los municipios sin contagios o vecindad habita solo el 4% de la población, en ellos podemos encontrar el 7% de la población nacional en situación de pobreza y el 14% de la población en situación de ponbreza extrema (véase tabla 4).

Tabla 4. Distribución por nivel de contagio
Tipo de Municipio Distribución de Población Población en situación de Pobreza Poblacción en situación de Pobreza Extrema Carencia por accesos a servicios de salud Gini promedio
Con contagios 80% 71% 52% 83% 0.40
Vecinos de contagios 15% 22% 34% 14% 0.39
Sin contagios o vecindad 4% 7% 14% 3% 0.39
* Fuente: Coneval, 2015

A nivel de categorías de contagio, podemos ver que mientras en los municipios con contagios, la población en pobreza extrema representa un 5.15%, para los municipios sin vecindad o contagios sube a un 26.6% de la población total de esos municipios. no obstante lo anterior, resulta por demás paradigmático que el nivel de desigualdad promedio en los tres grupos de municipios es casi el mismo.

Por otro lado, si analizamos la cobertura de la red de programas sociales del gobierno federal, se observa una fuerte presencia del Estado. De acuerdo a la Secretaría de Bienestar, en 2019 se tuvieron 74.3 millones de personas beneficiarias, de las cuales el 68.7% se ubicaron en municipios con casos confirmados. Es decir, la cobertura de los programas sociales llegó alrededor del 52.4% de la población que habita en estos municipios. En el caso de los municipios sin contagios o vecindad, la cobertura representó el 111.1% de la población1 de estos municipios y el 152.8% de la población en situación de pobreza (véase tabla 5).

Tabla 5. Cobertura de programas sociales
Municipios Personas beneficiarias Cobertura respecto a la población total Cobertura respecto a poblacion en situación de pobreza
Con contagios 51,184,008 52.4% 135.8%
Vecinos de contagios 17,539,595 94.3% 146.7%
Sin contagios o vecindad 5,665,428 111.1% 152.8%
* Fuente: Secretaría de Bienestar, 2019
INEGI, 2015
Coneval, 2015

Infraestructura de salud

Finalmente, en lo que refiere de los acervos humanos y de infraestructura de salud disponible por cada 100 mil habitantes, se observa nuevamente el contraste entre las regiones con contagios y el resto del país. Este puede ser hasta casi el doble en municipios de contagio, tanto en personal médico, de enfermería como el número de camas totales (véase tabla 6).

Tabla 6. Infraestructura hospitalaria por cada 100,000 mil habitantes
Municipios Personal médico Personal de enfermería Camas
Vecinos de contagios 119 162 66
Con contagios 225 303 126
Sin contagios o vecindad 132 176 86
* Fuente: Secretaría de Salud, 2019

¿y la apertura?

Por último, no obstante que la propia Secretaría de Salud anunció que los primeros municipios donde se concluirá la Jornada Nacional de Sana Distancia será en aquellos donde no hubiera casos confirmados o vecindad a municipios con casos confirmados, queda la duda sobre la temporalidad de estos criterios. Al día de hoy, solamente se han presentado casos positivos de Covid-19 en 510 de los 738 donde se han confirmado en las últimas dos semanas, esto es, una reducción del 30.9% de los municipios. Por ello, resultará fundamental establecer pautas y protocolos para la re-apertura económica, que ayuden a generar certeza de la próxima etapa que estamos por iniciar.

A modo de una breve reflexión final, me gustaría apuntalar la complejidad tanto territorial como sectorial al analizar el impacto del Covid-19 en México. Sin embargo, la construcción y diseño de políticas de protección al empleo, no puede disociarse tanto de las necesidades específicas de los grupos más vulnerables, como de la propia dinámica del aparato productivo nacional. Gran parte de la literatura emergente en la Economía del Covid, apuntan a la necesidad de acciones decididas del Estado. Con un mantra de “whatever it takes”, las economías desarrolladas han puesto sus cartas sobre la mesa, sin embargo, la pregunta en México parecería ser ¿hasta dónde está dispuesto el Estado?, al tiempo.

Algunas consideraciones

Antes que nada me gustaria destacar la labor titánica de quienes hacen este esfuerzo de integrar y publicar los datos tanto a nivel federal como de las diferentes secretarias estatales. Este esfuerzo es fundamental para construir mejores y más informadas políticas públicas. Para finalizar, si estan interesados en ver el detalle de las estimaciones y todo el código en R para que lo puedan replicar en casita, pueden checarlo en mi Git, RStudio Cloud o escribirme a Twitter.


  1. De acuerdo a datos del Conteo 2015